Gestión de calidad en el entorno hospitalario
Implementar un sistema de gestión de calidad en el sector hospitalario puede resultar un reto difícil, sin embargo, es posible. Lo ideal es lograr mediante el mismo múltiples ventajas que impliquen la mejora continua en sus procesos, la optimización del recurso financiero disminución de costos por fallas internas y externas, buena relación con los usuarios, mayor grado de satisfacción del paciente, del usuario interno de otros servicios del hospital y del mismo personal de la unidad, conllevando a un mejor concepto de la
institución.
En ese orden de ideas, la gestión de calidad es un proceso dinámico que permite identificar las posibles falencias y oportunidades para alcanzar una mayor competitividad, eficiencia y rendimiento mediante el mecanismo de mejora continua, lo que impulsa a constantes inspecciones y actualizaciones, utilizándose como un componente fundamental para el desarrollo de las organizaciones.
Allí también entra el componente de la planeación estratégica, que hace referencia al conjunto de planes operativos para alcanzar los objetivos trazados por una organización, donde establecen políticas y estrategias consolidadas a través de una estructura organizativa enfocadas a la toma de decisiones a largo plazo. De esta forma, se evitan errores en los procesos operacionales y se mantiene la calidad que la demanda del servicio (hospitalario) en cuestión exige.
Con base en eso, se proponen algunas etapas para la implementación de la planeación estratégica en el sector hospitalario:
Análisis del nivel de elementos estratégicos: allí se agrupan 9 elementos integrados por la visión, misión, valores que se definen en una sola palabra como marco filosófico, siendo este la esencia del centro hospitalario, y además de eso los objetivos generales y específicos, los principios rectores, líneas de desarrollo, estrategias, proyectos y acciones.
Análisis interno y externo del hospital (FODA): allí se conocen la fortalezas, oportunidades, debilidades y amenazas del centro hospitalario en cuestión. Es importante realizar el análisis constantemente cada 2 años en compañía en su totalidad del personal de la organización, desde la jerarquía superior hasta el nivel operacional tanto administrativos como médicos.
Sin embargo, también se proponen otros modelos para la gestión de calidad aplicando la mejora continua y enfocados en identificar las necesidades y expectativas del afiliado que se tienen en cuenta para el diseño y ejecución de actividades. Algunos de los principios de aquellos modelos son:
- Liderazgo en el más alto nivel jerárquico de la organización.
- Asegurar que todo el personal se centre en satisfacer las necesidades del beneficiario.
- Procesar sistemáticamente a corto y largo plazo el proceso de calidad, a partir de los objetivos organizacionales.
- Llevar a cabo la medición del proceso de mejora de manera clara, de tal forma que se pueda visualizar las fallas de la no calidad para encontrar posibles soluciones factibles.
- Proporcionar el recurso necesario que permita capacitar al personal para que refuercen sus conocimientos con actitudes positivas.
- Reforzar al talento humano para tomar decisiones y promover el crecimiento de los equipos de trabajo.
- Desarrollar métodos que fortalezcan el proceso de la calidad en todas sus fases y desde el inicio.
La aplicación de la gestión de calidad en los centros hospitalarios es de gran importancia para mantener la preferencia del usuario, generar una imagen y reputación positiva de la institución, y de este modo, sobresalir ante la competencia. El centro en cuestión logrará un punto de continuidad para que sus usuarios que se convierten en pacientes creen una opinión, percepción y emoción preferiblemente positiva de la atención y servicio recibido.